domingo, 30 de abril de 2023

TODO LO TENGO EN ÈL

Si miro hacia atrás mi vida era un desorden tremendo, pensaba muchas cosas feas, me sentía muy sola y ni ganas de vivir tenía... Llegué a creer que no tenia valor alguno.

Podía ver, escuchar, sentir, podía andar y respirar, pero no podía vivir plenamente, porque me ocupaba de ver lo que me faltaba en vez de DISFRUTAR TODO LO QUE YA TENIA. 

Incluso ya con una familia formada mi corazón se entristecía porque mis sueños y anhelos eran simples, pero importantes para mí y veía como los días se me pasaban por delante... mi juventud se iba y yo cada vez mas consumida por dentro, no conseguía tener esa familia que tanto soñé... 

En mi familia no eramos mas que personas que dormíamos bajo el mismo techo. Cada tanto tiempo nos reuníamos y compartíamos una comida, algunas risas, pero aun seguíamos sin conocernos realmente...

Que difícil es convivir siendo unos desconocidos, cada uno con aspiraciones diferentes, eso me hacia sentir frustrada y sola, muy sola...

Ciertamente cuesta vivir bien cuando a tu alrededor parece que todo se derrumba y claro teniendo esa perspectiva era mas fácil para mi morir que luchar por salir adelante.  

En aquellos años yo no creía en la existencia de Dios y tampoco me parecía que haya un diablo, era indiferente a todo lo espiritual. Solo creía en lo que veía.

Aunque cuando lloraba hablaba sola y decía: mi único deseo es tener una familia fundada en amor, quiero un esposo que me ame, me cuide y me acompañe, alguien a quien no tenga que hacer mas que mirarlo a los ojos y se compenetre y entienda mi sentir. Quería muchos hijos, tal vez cinco... Me imaginaba que íbamos de paseo juntos a jugar a la pelota y compartir algo rico, muchas risas y atesorábamos esos momentos en el corazón, pero mi realidad era opuesta a todo lo que guardaba dentro de mi, no tenia un esposo que me acompañe en mis sueños tan comunes, tan de película dicen muchos y mas hoy en día en el mundo de las mujeres fuertes y que todo lo pueden solas, como que no necesitan un hombre a su lado. 

Pienso que era tal mi inmadurez que solo podía ver por mi, aunque mis sueños eran nobles y nos harían bien a todos los de la casa, yo quería que me hicieran feliz a mi manera, solo como a mi me gustaba y llegaba al punto de pelear con mi pareja porque las cosas no se hacían como yo quería.

La discusión en casa era frecuente, años y años igual. 

Pasó el tiempo y Dios me fue a buscar... de una manera tan impactante para mi, que aunque no quería creer y reconocer que era Dios, pues me toco hacerlo. Lo vi en cada movimiento, en cada segundo de ese instante en el cual estuvo frente de mi. Fue una tarde difícil, mi mente estuvo a mil y no lo podía comprender.

Desde ese momento vi como si el me hubiera quitado algo que tapaba mis ojos y me mostró cada momento en el cual me puse en peligro yo misma y el me había rescatado para que hoy pudiera estar acá diciéndote ¡Él si existe!

Y pude entender que las cosas no eran como yo imaginaba, pensaba que lo tenia todo y aun así no podía ser feliz, pero me faltaba lo mas importante, LA PRESENCIA DE DIOS EN MI VIDA.

EL SEÑOR JESÚS ME DIO IDENTIDAD, ME COMPLETÓ Y ME CONSOLÓ, CON MUCHA PACIENCIA ME ENSEÑÓ A VIVIR, PORQUE LO QUE YO ENTENDÍA QUE ERA VIVIR NO ERA COMPATIBLE COMPLETAMENTE CON ÉL.

Como anteriormente contaba mis sueños eran buenos, pero mis intenciones eran solo para mi felicidad y Dios es ese Dios que ama y en su palabra enseña que el amor es darlo todo por el que amas, así como lo hizo JESÚS en la cruz, y sinceramente yo no quería dar nada, solo me importaba recibir.

Hoy puedo decirte que mi alfarero me fue moldeando y cada vez me acerca mas a la forma con la cual èl me diseñó. He notado cambios en mi personalidad y mis intenciones ya no son las mismas, aunque mis sueños y anhelos siguen vigentes porque Dios no llegó a mi vida para matar o pisotear mis sueños. El Señor vino a enseñarme como vivirlos, para que esos sueños no sean derribados, así que me contó el secreto... dijo que lo principal para que esos sueños permanezcan era que mi casa fuera construida y cimentada sobre una roca firme, y esa roca tiene nombre, se llama JESUCRISTO.

¡CUANDO AFIRMO MIS SUEÑOS EN ÉL TODO ES MEJOR, YA NO MIRO LO QUE ME FALTA, PORQUE HOY SE QUE SI TODO LO MATERIAL ME FALTARE Y LO ÚNICO QUE ME QUEDA ES DIOS, SEGURA ESTOY DE QUE TODO LO TENGO!


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Me encantaría saber que opinas...